Mi ciudad natal es Tetuán, donde me crié y prepare mis estudios secundarios en institutos españoles. Los primero años fueron en el instituto de  Sra. de la  Milagrosa  y el bachillerato en el Instituto Ntra.  Sra del Pilar en  1980.

Una vez obtuve mi bachillerato me trasladaré a Fez para terminar mi carrera universitaria, dado que en esa época todavía no había universidades en Tetuán. Así que inicié mi  carrera universitaria en filología española, con el propósito de trabajar como profesora de Lengua Española. Pero mi orientación se fue desviada por otra profesión más autónoma y libre. A partir mi experiencia profesionales en el campo del turismo 1984, en una agencia de viaje, lo tuve claro que es el ámbito del turismo  donde  veía enfocada mi vocación.   

Mi Primer trabajo  fue en una agencia de viajes en Calpe Alicante como coordinadora de la agencia, reorganizando circuitos con hoteles y guías en Marruecos.  Más adelante salí al terreno y empecé  a  acompañar los autocares turísticos como  guía correos, con agencias de viaje españolas como   Dunia Tours, Mundo Joven, Calpe tours,  etc.  Hasta  el año 1987 cuando abrieron en Marruecos una bolsa para guías turísticos a nivel nacional, postule  como candidata  para el examen y aprobé, obtuve la licencia  de la primera mujer guía turística en Fez.

En año 1992 decide dejar de salir como acompañante en los tours y opté por trabajar como guía local en Féz.  Como única mujer que fui trabajando en este campo, me supuso un reto y desafío  rompiendo barreras y prejuicios socioculturales.  Primero, en el seno de mi familia en la cual mi padre, que en paz descanse,  no estaba de acuerdo con mi reorientation laboral que Escogí, promovida por su temor a protegerme  de un entorno patriarcal dominado por hombres.  Pero gracias a mi profesionalidad y a mi acecho  por conseguir mi sueño, mi padre acabo aceptando mi decisión y apoyando me en todo lo que hacía falta, porque percibía mi felicidad y mi satisfacción cuando venía a verme en Fez.  Quería tener mis propias normas, autónoma y  ser responsable de mi misma sin que me controle nadie y así fue.

 Después de 28 años de experiencia como guía y conociendo tantas personas y tantas culturas de las cuales aprendí mucho. Mi trabajo me dio la oportunidad  de conocer a muchísimas personas y personalidades importantes en todos los sectores, tanto  político como artístico y social. Ejercía mi profesión con mucho amor y responsabilidad. Cuando digo guía digo embajadora de mi  País, porque yo era una referencia de una mujer marroquí moderna culta y al mismo tiempo sin dejar de lado mis costumbres y tradiciones.

Con los años surgió la idea de montar una casa de huéspedes,  por lo cual decidí transformar mi casa en un alojamiento turístico como una casa de hospedaje, bajo el nombre de » Riad Raouia», siempre relacionado con el mundo de turismo pero de otra manera,  recibiendo a los turistas en mi propia casa en vez de un autocar, de echo lo que les explicaba en el autobús o en la callejuelas de la Medina,  ahora lo viven conmigo siendo mis huéspedes de honor.

Admito que es una tarea muy difícil y muy sensible cuando eres profesional y exigente. Primero tienes que formar a tu personal que no es una tarea fácil, hacerles entender que los turistas son nuestros huéspedes y que están aquí porque quieren sentirse como en casa y descubrir nuestras costumbres y tradiciones, con el propósito de ofrecerles el mejor servicio,  orientar les y aconsejarles  para que su instancia sea repetible e inolvidable. No solo enfocada únicamente a un simple alojamiento sino más bien un acercamiento en primera persona a todo un país, Marruecos  con su historia y cultura y que le trasmitimos encantados. De hecho tengo también mi propio Transporte de turismo «http://fez-desert-trip.com.» para la comodidad de mis huéspedes se ofrece varios tipos de servicios y llevando a la práctica  todo lo que aprendí en mi carrera profesional turística, organizando tours, excursiones,  con asesoramiento y orientando  mis huéspedes a descubrir este precioso país hospitalario tolerante y  rico en su diversidad cultural como en sus paisajes.

Así que bienvenidos a Riad Raouia. Un Riad de encanto y un nido de paz como lo han descrito nuestros huéspedes.